viernes, 9 de octubre de 2015

Huerta Grande (Ferrocarril Córdoba y Noroeste)






Vista desde la calle..



Ingreso y laterales...



Viste principal del edificio...


Vista hacia La Falda...

Vista hacia Thea...

Roído bebedero...








Galería y sus detalles...

Primer tanque de agua y su manga hidrante...

Pequeño galpón de encomiendas...





Viviendas del personal auxiliar...




Segundo tanque de agua, manga hidrante, firma de fabricante e inscripción del Ferrocarril Córdoba y Noroeste.

Molinete...



Corredor Alta Córdoba-Cruz del Eje. Hablar de Huerta Grande, de este simpático Ferrocarril, el cual surca nada más y nada menos que al Valle de Punilla en la provincia de Córdoba, obnubilando a pasajeros con paradisíacos paisajes, es adentrarse en una sabrosa historia que desglosaremos a continuación.
Para el año 1890 autorizado por la ley de la provincia de Córdoba, se construye el Ferrocarril Córdoba y Noroeste, de la mano de Otto Bemberg y Compañia. Este Ferrocarril iría desde la Ciudad de Córdoba hasta Cruz del Eje, librándose al servicio el 30 de Julio de 1891 la primera sección Córdoba-La Calera, el 4 de Septiembre hasta San Roque, el 10 de Agosto de Cosquín a Cruz del eje, y finalmente de San Roque a Cosquín el 7 de Marzo de 1892.
Luego de un convenio privado efectuado en 1901, el Córdoba y Noroeste pasa a ser explotado por el Ferrocarril Central Córdoba, quien lo operaría hasta 1909. A partir del mentado año, se aprueba la compra por parte del Estado Nacional, según la Ley 6300 del 20 de Julio del corriente, incorporándose para el 11 de Octubre a la red del Estatal Ferrocarril Central Norte. 
Durante las nacionalizaciones masivas, llevadas adelante por el gobierno de Juan Domingo Perón, el Ferrocarril Córdoba y Noroeste pasa a formar parte del Ferrocarril Nacional General Belgrano, al igual que todos los ferrocarriles de trocha angosta del país. Con el tiempo, el Córdoba y Noroeste, sería conocido como el Corredor o Ramal A1 del Ferrocarril Belgrano. 
La época de apogeo de este Ferrocarril se daría en la década del 60', cuando los habitantes del Valle de Punilla y turistas provenientes de Córdoba, Buenos Aires y Rosario, eligen el Ferrocarril por sobre otros medios de transporte (utilizando las conexiones férreas desde sus ciudades), debido a su economía, rapidez y atención a bordo.  Las nostalgias llegarían más tarde...
En al año 1977, durante la última dictadura militar, este servicio es clausurado por completo, en el marco del nefasto "Plan de Racionalización Ferroviaria", el cual afectó a muchas líneas del país.
Durante el Menemato, en la nefasta década del 90', el Ramal A1, es transferido a la provincia de Córdoba. El Gobierno Provincial por esos años, declaró que la provincia de Córdoba se encontraba completamente insolvente para la financiación del servicio. 
Corría el año 1993, cuando una sociedad de capitales privados cordobeses, cuales explotaban el Zoológico de Córdoba y el Autódromo Oscar Cabalén de Alta Gracia (Grupo Alcázar), se hizo de la concesión del Viejo Córdoba y Noroeste, operando así un servicio ferroviario turístico entre la Ciudad de Córdoba y Capilla del Monte, el cual duraría unos siete años.  Para el año 2001, debido a un litigio judicial, se ve afectado el servicio ferroviario, el cual vuelve a desaparecer. Por tales motivos, en Octubre de 2004, el Gobierno de la provincia de Córdoba cancela completamente la concesión, mediante un decreto, ya que al encontrarse suspendido el servicio desde 2001, esto desvirtuaba absolutamente el contrato de concesión, cual su principal móvil, era la reactivación y re-función del Ramal A1. 
El viejo Córdoba y Noroeste, desvencijado y herrumbrado, vuelve a manos estatales el 10 de Agosto de 2007, cuando el Gobierno Nacional, le entrega la explotación del mismo a Ferrocentral, empresa conformada por el concesionario de cargas de la Línea Mitre Nuevo Central Argentino y Ferrovías, concesionario de la sección local del Belgrano Norte, cual explotaba los servicios de Retiro a Tucumán y de Retiro a Córdoba en el corredor Mitre. Para este empréstito, se utilizaron tres coches-motores del tipo "Dupla" Alsthom/SOREFAME, los cuales arriban usados desde Portugal, y se los re-acondiciona en la empresa EMEPA. En un primer experimento, se libró el servicio Rodríguez del Busto-La Calera. Para mediados de Julio de 2008, se habilita el tramo La Calera-Cosquín, siendo este el más atractivo debido a las maravillas naturales de su paisaje. Un año más tarde, el servicio finalmente parte desde la Estación Alta Córdoba en la ciudad homónima. Esto duraría apenas un efímero tiempo; parte de la traza se vio invadida por villas de emergencias durante el año 2013, obligando al servicio a partir nuevamente desde Rodríguez del Busto. En Septiembre de ese año, el Estado Nacional se hace cargo de la corrida del servicio ferroviario, mediante Trenes Argentinos Operadora Ferroviaria, Línea Belgrano. El 16 de Marzo del presente año, el servicio volvió a partir de la Estación Alta Córdoba.  Aún se espera la rehabilitación completa del corredor, llegando así a Cruz del Eje.
Con respecto a la estación Huerta grande, esta no es servida por ningún servicio ferroviario desde el mes de Mayo del año 2001. Se encuentra dentro del Municipio de La Falda en el Valle de Punilla, en la provincia de Córdoba. La misma se ha salvado de usurpaciones, debido a la instalación de la "Terminalidad Educativa de Nivel Medio de Huerta Grande." La construcción, se encuentra en óptimo estado de conservación y esta es de diseño "Neo Colonial." La misma corresponde al año 1935, y fue construida por el Estado Nacional. Anteriormente, existió en su lugar una estación algo más chica, construida por el Ferrocarril Central Córdoba, en épocas que el inglés Ferrocarril operaba al Ferrocarril Córdoba y Noroeste. Su predio es enorme y se puede apreciar no sólo el gran tráfico de pasajeros que la zona supo tener, sino también la carga. Aún existen dentro del cuadro, una serie de viviendas que supieron alojar al personal auxiliar; aún viven en ellas familias ferroviarias.
Aún conserva sus tanques de agua, de épocas del Córdoba y Noroeste y el pasto del predio ferroviario, es minuciosamente mantenido.
Hay desidia y herrumbre, por supuesto, como en todo paraje ferroviario que no recibe tren alguno. Cabe recordar que la estación Huerta Grande, pertenece al tramo Cosquín-Cruz del Eje, cual aún espera una pronta reactivación.
Huerta Grande, se encuentra detenida en el tiempo, esperando aún recibir pasajeros, para asombrarlos con sus atractivos naturales. Ya es hora, que en esta ola de reactivación ferroviaria, los rieles sepultados bajo tierra vuelvan a brillar.
Qué vuelva el tren...